viernes, 10 de diciembre de 2010

El Nuevo Mundo


De todos es sabido,  aunque con algunas discusiones, que Cristóbal Colón descubrió el Nuevo Mundo. Pues bien, gracias a la decisión de un “gran amigo” el cual decidió que lo mejor para nuestra relación “compañero/laboral”  era cesarla, se  abrieron delante de mí nuevos horizontes. Yo también he descubierto otro Nuevo Mundo. Un Mundo muy cercano y lejano a la vez para la inmensa mayoría de nosotros. Y digo nosotros en masculino porque el género femenino está inmerso en él desde tiempos inmemoriables. Sí amigos, acabo de descubrir el Mundo de las Tareas del Hogar.

    Al parecer, ese cajoncito que todos tenemos cerca de donde descansamos por la noche, no es automático. Hasta ahora bastaba con abrirlo y sacar una prenda limpia, siempre estaba lleno. Mas aún, la que dejabas por la noche en el suelo casi por descuido, no desaparecía como si de una bomba de humo ninja se tratara. Todo esto requiere un complejo entramado de operaciones a las que he sido invitado a realizar. La mentada prenda dejada la noche anterior,  yacía en el suelo como un conejo abatido a tiros a la mañana siguiente. No solo se trata de unos bóxer, se le suman; los calcetines que mas adelante los trataremos en profundidad, camisetas, jerséis y demás avalorios para la lucha contra el frío. Esto lo hemos de multiplicar por todos los miembros de la familia y el resultante lo volveríamos a multiplicar por todos los días de la semana, lo cual nos da una montaña de ropa, que extendida en el suelo,  bien podría servir de cama a una piara de cabras como las que tienen mis tios. Tal volumen de tejido amontonado lo hemos de trasladar al piso inferior donde reside en una gran sala y subida en una especie de púlpito, al parecer, la reina auténtica de la casa. Un aparato feo por donde lo mires, dispuesto de un solo agujero por el que deberemos introducir y extaer de sus entrañas las própias prendas. Esto a mi modo de ver lo convierte en un aparato fetiche… en fin sigamos. No creais que este Polifemo come cualquier cosa, pues hay que hacer cursillos previos para su dieta alimenticia. No acaba aquí, también dispone de una serie de botones con luces y dibujitos, letras y números… ¡Pero si es muy fácil! Me repite una y otra vez mi mujer. ¡Seguro que si fuese una maquinita tuya la sabrías llevar al dedillo!Volviendo a los famosos calcetines, es como montar el famoso cubo de Rubik. Tamaños, colores y modelos se mezclan entre sí similando una gran bola multicolor imposible de conectar dos piezas iguales. Recuerdo haber visto por casa, una bolsa llena de dichas fundas para pies. Todos mezcladitos y que sirve como “distracción” a mi mujer que se afana en emparejarlos mientras esta en el sofá viendo la tele.

 Pasemos a otra de las peculiaridades de este Mundo.¿ Sabeis ese recipiente donde amablemente se nos sirve la comida y la cena? Jajaja pues  carecen de cinta transportadora hacia lo que parece ser una pequeña cámara de los horrores llamada pica o lavadero de platos. Cuando digo cámara de los horrores, me quedo corto. Hay días que parece hayan pasado por casa a cenar todo el Regimiento de Artillería. ¿Tantos platos y ollas tenemos?
    La aspiradora,¿la habeis probado alguna vez? Nunca pensé que una cosa tan pequeña pudiese llegar a ser  tan ruidosa y  extresante. Es como si estuvieses  dentro del motor de un Jumbo. Mi “suerte”, es que solo recibo sonidos por la parte izquierda, es decir, una oreja no me funciona para que nos entendamos. No puedo imaginar al individuo que con sus dos pabellones auditivos en buen estado, se atreva a presionar con el pie el osado botón situado en el lomo de la bestia.
    La lista,  se sigue incrementando con labores como la de hacer del momento de la comida o la cena, un momento plácido y sin comentarios como:  ¿Y esto que es? ¿Qué le has echado? Doy gracias porque la cocina es para mí como un hobbie, pero cuando lo tienes que hacer obligado y todos los días, pasa a ser una tarea mas a realizar en el cada vez mas corto dia. Es curioso, se me viene a la cabeza una preguntita machacante que acostumbraba a escuchar antes:  ¿Qué hago de comer hoy? Nunca creí que una pregunta,  disponiendo de tantas respuestas, te creara tal dilema diario.
     Seguiría con un sinfín de tareas que se me plantean y que intento resolver como buenamente puedo. Ahora que soy mas conocedor de este "Nuevo Mundo", aprecio y valoro mucho mas a  esas personas que tienen como labor diaria y sin excusa, esas tareas que estoy realizando desde hace poco tiempo. No por ello quisiera dejar definitivamente el  Viejo Continente, pues es en el que me siento mejor conmigo mismo. Os animo desde aquí, hombres del mundo, a que os adentreis y os pongais como reto personal, cumplir por una semana las tareas propias de llevar una casa. El reto parece fácil pero no lo es tanto.

1 comentario:

  1. Eres genial y sobre todo se lo mucho que me quieres igual que yo a ti Te Quiero por ser como eres por tus manias y por tus virtudes eres el mejor. (que no se te suba jejeje)

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